Más allá de la deuda de 400.000 euros que mantiene con Hacienda, lo cierto es que Carlos Baute -portada del “Especial Novias” del pasado mayo en “Sevilla Magazine”- lleva casi dos décadas en España seduciéndonos con temas como “Quién es ése”, aventura musical tras la que vendrá, después de verano, su esperada participación en “Tu cara me suena”
Por Ricardo Castillejo
Es un apasionado de la vida y de la música. Y un marido -de su esposa, Astrid-, ejemplar; un padre -de sus hijos, Markuss y Liene-, maravilloso; y un amigo generoso y entregado. Una de esas personas que merece la pena conocer y con las que vuelve a confirmarse cómo, cuanto más grande es un personaje, más sencillo y más asequible también. Protagonista del “Especial Bodas” de mayo de “Sevilla Magazine” (al que pertenecen las fotografías que ilustran estas páginas), Carlos Baute, a sus 44 años, es un eterno adolescente, seductor, juguetón y bromista. Una figura reconocida, nacional e internacionalmente, que lanza su nuevo single, “Quién es ese”, con las mismas ganas que cuando sacó su primer disco. Nada como la ilusión para mantenerse eternamente joven…
-El amor fue el “leit motiv” del número de mayo de “Sevilla Magazine”… ¿Cómo entiendes tú este sentimiento?
-El amor es el motor de mi vida. El de mi esposa es maravilloso. Se transforma y evoluciona día a día (y más cuando tienes niños). Mi mujer es la reina y los pequeños, unos príncipes que está prestados y se irán. Así que nos tenemos que dar amor, ella y yo, porque con los hijos puedes desbordarte y descuidar a la pareja.
-¿En el amor romántico crees?
-Sí. En realidad, tengo todos los tipos de amor. El que cuento en mis canciones está bien, porque es el de detalle, pero también debe haber esa venita maliciosa y venenosa para no caer en lo empalagoso. Eso hay que saberlo administrar, pasando con que hay que ser muy detallista y respetuoso con ellas.
-¿Algo que no perdonarías a nivel sentimental? ¿Una infidelidad quizás?
-No sé, no la he vivido. Cuando amas deberías perdonar. Lo que no perdonaría es ser deshonesto o la conveniencia. Nada más lindo que despertar interés por ti mismo. Me cautivan las personas por ser personas, no por lo que posean o por el cargo que tengan.
-¿Te han querido más o has querido más?
-Hombre, yo amo mucho y espero que también al contrario pase igual, si bien cierto que en alguna ocasión pueden haberme querido más (y viceversa). Lo que sí tengo clarísimo es que amo más a mis niños que ellos a mí.
-Es que ése, el de la paternidad, dicen que es el mayor de todos…
-Efectivamente. A tu pareja la amas de una manera, pero lo de los hijos no lo descubres hasta que eres padre o madre. Son sentimientos que están ahí escondidos y que solo se destapan cuando se produce ese nacimiento. Es indescriptible, lo más grande que hay. Doy la vida por ellos. Sin pensármelo.
-¿Te da lugar a ejercer de papá?
-Sí, por supuesto. Hubo un tiempo en el que me propusieron cantar en inglés, para llegar a un mercado mayor. Suponía elegir entre la familia y trabajar y yo escogí la familia y tener calidad de vida. He llegado a pasar nueve meses fuera de casa solo con un mercado como Latinoamérica y España con lo que, imagínate con más frentes abiertos… Estaría los doce meses fuera. Intento desconectar hasta del teléfono para estar con los míos y he aprendido a que, cuando tengo que concentrarme, lo hago a lo bestia y, si antes invertía cuatro días en un tema, ahora lo termino en cuatro horas.
-¿Qué papel hay entre Astrid y tú con ellos? ¿Cuál es más consentidor y cuál riñe más a los niños?
-Es una mamá maravillosa y hasta su parcela laboral la ejerce según necesita. Ella les educa y yo soy más la parte festiva y divertida, porque estoy menos a su lado. La niña, de cuatro meses, ahorita le pertenece a su madre y el niño, de 20, es más mío. Me vuelvo loco. Jugamos, me lo llevo con la bicicleta… Lo lindo es que Astrid y yo nos entendemos muy bien y nos queremos mucho. Ambos respetamos las opiniones del otro y eso es fundamental. Cuando ella regaña, yo me quedo callado.
-¿Nunca has despertado, por el éxito, los pies del suelo?
-No, no. Nunca. De veras. Por mi educación, mis padres, mis amigos… Eso está presente.
-Todo esto lo afirmas desde los 44 años que, supongo, hacen que ganes en seguridad… ¿Cómo ves a aquel Carlos Baute que llegó a España en el 2000?
-Con las mismas ganas y la misma ilusión y menos nervios por querer emprender mil proyectos. Eso sí, mi nuevo single me provoca la misma inquietud que el primer disco que saqué. Si no fuera así estaría muerto. Por lo demás es otra etapa. Jamás he sido irresponsable y siempre he cumplido, pero ahora más aún porque todo lo hago pensando en mi familia.
-¿La fama es sana o insana?
-Puede ser tu peor enemiga. Sin duda. Por eso lo mejor estar su whatsapp y hablarle de vez en cuando para decirle que no te vuelva loco (risas). Hay que ponerle límites porque se te puede ir de la mano. Y si quiero ir a algún sitio, como la Feria de Sevilla, me disfrazo. Me pongo gafas, mi capucha y barba y me la monto como quiero. A mí me conocen en ciertos países pero, lo de Justin Bieber o Ronaldo, debe ser horrible. Es lo menos bonito. Cuando se murió mi padre me pedían selfies y aquello me parecía una locura. O hace poco con Astrid, delicada en el hospital, que me sucedió lo mismo y tuve que decir que no. Claro que luego tiene unos beneficios espectaculares.
-Una vez escuché que dormías en una burbuja de oxígeno…
-(Risas) ¡Es la música! Y que te quieras a ti mismo y lleves una vida muy sana. No fumo y puedo tomarme una copa de vino con amistades, pero no estoy en mi casa y necesito una botella de alcohol. Lo que sí me he inyectado ozono, magnesio (para las defensas) y vitamina C, que no es nada raro. Solo por salud. Yo me veo bien pero supongo que, como le pasó a un amigo, llegará el día en el que me caigan todos los años juntos (risas). Las arrugas y las canas siempre serán bienvenidas.
Dirección: Ricardo Castillejo
Reportaje gráfico: Nacho Álvarez
Ayudante de fotografía: Alejandro Mármol
Maquillaje y peluquería: Constantino Sánchez
Producción: Iván Alcázar
Ubicación: Hacienda El Arenoso
Ropa Carlos Baute: Protocolo Novios / Masaltos (zapatos)
Ropa Pablo (Modelo): Protocolo Novios Ropa Noelia (modelo): Nuribel Couture/Misura Costura
Agradecimientos Especiales: Alfonso Chaves (automóvil)/ Tolentino (tocado)/ Secretos de novia (zapatos)
Fuente http://www.sevillamagazine.es/carlos-baute-la-fama-puede-ser-tu-peor-enemiga/